La exfoliación de la piel es fundamental para eliminar las células muertas que se acumulan en los poros de la piel. Gracias a la exfoliación los poros se liberan de las impurezas y pueden respirar mucho mejor. Con esto se consigue que la piel tenga mejor color y que se conserve más joven con el tiempo.
Seguro que has oído hablar muchas veces de la exfoliación en las manos o en la cara. Sin embargo, en los pies también es importante ya que sufren el mismo problema. En este caso puedes conseguir esta exfoliación con el uso de unos calcetines exfoliantes.
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Calcetines exfoliantes para unos pies más bonitos
El propósito de los calcetines exfoliantes es el mismo que pudiera tener cualquier esponja exfoliante o cualquier otro tipo de producto, limpiar la piel. De esta forma podrás conseguir unos pies mucho más bonitos, perfectos para lucirlos en la piscina en verano.
Por otro lado, la importancia del calcetín exfoliante es mayor si tenemos en cuenta que los pies sufren mucho más que el rostro. A pesar de que no se encuentran habitualmente expuestos a los agentes del exterior, el hecho de tener que lidiar con el sudor o con otras impurezas hace que la exfoliación sea más necesaria.
¿Cómo son y cómo se utilizan estos calcetines exfoliantes?
Los calcetines exfoliantes son, como su propio nombre indica, unos calcetines que tienen la particularidad de que te van a exfoliar los pies. Sin embargo, no se trata de unos calcetines al uso, ya que es del todo recomendado ponerse unos calcetines normales encima de estos calcetines exfoliantes.
Esto es posible gracias a que los calcetines exfoliantes se adhieren al pie. Lo primero que tienes que hacer si quieres utilizar unos calcetines exfoliantes es lavarte bien los pies. Procura ablandar la piel con el agua y luego sécalos bien.
Ahora llega el momento de colocarte los calcetines exfoliantes. Estos calcetines te los puedes poner como si se tratase de un calcetín normal y corriente, no tiene mucho misterio. Lo único que debes de hacer una vez puestos es masajearlos con cuidado para que se peguen bien a la piel y empiecen a hacer su efecto.
Cuando hayas hecho esto ponte encima unos calcetines normales. El propósito de ponerse este calcetín es que los calcetines exfoliantes, que son más delicados, no se nos rompan durante el proceso.
Exfolia tus pies mientras llevas a cabo otras tareas
Lo único que tienes que hacer ahora es dejarlos actuar. Dependiendo de lo que aguantes podrás estar entre media hora y dos horas. No te preocupes, no molestan en absoluto, sin embargo, algunas personas tienen los pies más sensibles y no pueden aguantar tanto tiempo.
Pasadas las dos horas lo siguiente será quitarse los calcetines, tanto los normales como los exfoliantes y aclararte bien los pies con agua para que se lleve toda esa piel muerta que ha salido de los poros. Los productos químicos con los que cuenta el calcetín exfoliante ya han hecho su efecto y tendrás el pie como nuevo.
Una forma de lo más sencilla de poder exfoliarse los pies a través del uso de unos calcetines. Más fácil, imposible.